DAVID LAGMANOVICH
BIOGRAFÍA
Foto David Lagmanovich (Fuente: Página de Agencia Interamericana para la Cooperación y el Desarrollo)

David Lagmanovich nació el 9 de agosto de 1927 en Huinca Renancó, provincia de Córdoba, Argentina. Su padre, Germán Lagmanovich (1902-1982), ruso nativo de un lugar rural cercano a Kiev, había emigrado a América a consecuencia de la revolución de 1917 y de las guerras civiles posteriores. Su madre, Patricia Gabriela María Fabris (1905-1981), natural de Carlos Casares, provincia de Buenos Aires, era hija de inmigrantes italianos llegados a la Argentina a finales del siglo XIX.

Los primeros años de David Lagmanovich transcurrieron en la pampa (Nicolás Bruzone, provincia de Córdoba), en la Patagonia (Chimpay, en la entonces gobernación de Río Negro) y en la ciudad de Buenos Aires. El 20 de agosto de 1936 llegó con su familia a Tucumán, ciudad con la que habría de mantener una larga vinculación. En la Escuela Belgrano, de Tucumán, concluyó sus estudios primarios; en la Escuela Superior de Comercio de la misma ciudad cursó los secundarios (simultáneamente con estudios musicales en la Academia de Bellas Artes de la Provincia, hoy Conservatorio Provincial de Música); y en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Tucumán obtuvo sus primeros títulos de nivel superior: Licenciado en lengua y literatura españolas (1955) y Profesor de lengua y literatura española (1958).

Trabajó desde los 12 años de edad (1939), primero vendiendo el periódico vespertino El Orden, luego en otros oficios callejeros, y más tarde, ya adolescente, como músico en pequeñas orquestas populares. Fue empleado administrativo de la Universidad de Tucumán entre 1948 y 1953, año en el que fue dejado cesante por no pertenecer al partido peronista que estaba entonces en el poder. A consecuencia de este hecho ingresó en la redacción del diario La Gaceta, desde 1953 hasta 1962, y en donde fue sucesivamente reportero, cronista, redactor, jefe del archivo y editorialista, además de crítico musical y colaborador frecuente del suplemento literario del periódico.

Después del derrocamiento de Perón en 1955 pudo trabajar nuevamente en organismos estatales, y así inició su carrera docente en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Tucumán. Enseñó allí entre 1956 y 1962, en las cátedras de Introducción a la literatura y de Literatura inglesa y norteamericana. En los últimos días de 1955 contrajo matrimonio con Inés Cullell. De esta unión nacieron cuatro hijos: María Inés (1956), Juan Cristián (1960), Martín Sebastián (1964) y Mariana Eleonora (1966).

Su primer contacto con los Estados Unidos se produjo en 1958. Becado por la Graduate School of Journalism de Columbia University, cursó allí estudios superiores de periodismo y regresó con el título de Master of Science (1959). De regreso en la Argentina publicó en Tucumán sus primeros libros: 'Circunstancias' (1961) y 'Ocasiones' (1962), que son colecciones de poemas, y 'Réquiem y otros cuentos' (1962), su único libro de narrativa. También pertenecen a este período la compilación 'La música latinoamericana hoy' (1961) y la monografía publicada, por la Universidad Nacional de La Plata, 'Los viajeros de la ciudad' (1961).

En 1962, acompañado por su esposa y sus hijos María Inés y Juan Cristián, se radicó en los Estados Unidos, en la ciudad de Washington D.C.. La permanencia en esa ciudad habría de prolongarse durante 15 años. Entre 1962 y 1966 (y luego, más brevemente, entre 1970 y 1971) desempeñó tareas en los campos de la información pública y la edición de textos especializados en la Oficina regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud. En 1963 inició los estudios de doctorado en la Escuela de Lenguas y Lingüística de Georgetown University. Se especializó en lingüística teórica, lingüística aplicada y lengua española. Obtuvo el doctorado (Ph.D.) en junio de 1967, con una tesis en lingüística: “Sintaxis del gerundio español”.

Ya en 1965, antes de concluir sus estudios, David había dictado cursos de literatura hispanoamericana y de lingüística hispánica en la universidad de Georgetown. Terminado sus estudios, regresó a la Argentina con su familia, con la intención de continuar allí su labor docente. Pero en 1967 el país estaba bajo una dictadura militar, cuyos personeros bloquearon su reingreso en la Universidad Nacional de Tucumán y su ingreso en otras casas de estudio. Al no poder obtener ningún cargo que le permitiera sostener a su familia, ese mismo año David regresó a Washington, donde Georgetown University lo retuvo como profesor y jefe de la División de Español, cargos que ejerció hasta 1970.

Una nueva etapa académica se abrió para David en 1971, con su incorporación a la Universidad Católica de los Estados Unidos (The Catholic University of America), sita también en Washington. Allí enseñó, hasta 1977, cursos de literatura hispanoamericana y de lingüística general e hispánica. Impulsó en esa universidad los estudios latinoamericanos, e incrementó sus actividades de investigación, concretadas en numerosos artículos, comunicaciones en congresos y simposios, y otras tareas profesionales.

De esta época son sus libros 'La literatura del Noroeste argentino' (Rosario, Argentina, 1974) y 'Estudios sobre los cuentos de Julio Cortázar' (Barcelona, 1975). En otro orden de actividades, durante esos años fundó una pequeña editorial para la publicación de textos poéticos escritos en español en los Estados Unidos, bajo el nombre de Ediciones Solar. Allí aparecieron sus poemarios 'Contingencias' (1976), 'Fluctuaciones' (1977), 'Vaivenes' (1982) y 'Variaciones y contrastes' (1986); salvo el primero, todos ellos salieron después de haberse alejado de la capital norteamericana.

El período de Washington llega a su final con la muerte de su hijo Juan Cristián (1975), hecho de hondas repercusiones en su vida familiar y profesional. Su familia regresó a la Argentina en 1976, y él la siguió al año siguiente. En la Argentina se vivían entonces los años de una nueva dictadura militar. Dada su militancia democrática, la obtención de trabajo se convirtió en un problema importante. Finalmente David, gracias a la generosidad de Juan Carlos Ghiano, fue nombrado en un modesto cargo interino en la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de La Plata.

Más tarde obtuvo un cargo en la Universidad Nacional del Comahue, en Neuquén, de donde fue expulsado en 1982, acusado (con razón) de abrigar ideas contrarias a la dictadura que ensangrentó su país durante el período 1976-1983. Enseñó también, siempre en cargos subalternos o interinos, en la Universidad Nacional de Mar del Plata, en la Universidad Nacional de Lomas de Zamora, y en otros lugares de aún menor nivel académico.

Su contacto con la vida académica de otros países se reanudó a partir de 1982, en que por primera vez enseñó como profesor invitado en la Universidad de California, en Davis. Regresó a esa universidad en 1983 y en 1988; estuvo en Harvard con una beca Fulbright para investigadores formados (1985) y luego como profesor invitado (1986); enseñó, también en 1986, en la Universidad de Massachusetts, Amherst; lo hizo asimismo dos veces en la Universidad de Colonia, Alemania (1987 y 1988); en la Universidad de Michigan, Ann Arbor, estuvo en 1989, y poco después, durante un año íntegro, en Ohio State University, Columbus, Ohio (1989-1990). En 1992 se dedicó durante tres meses a sus tareas de investigación en el Instituto Iberoamericano de Berlín, con una beca del gobierno de la República Federal de Alemania.

En cuanto a su carrera académica en la Argentina, el restablecimiento de la democracia en diciembre de 1983 dio por resultado su actuación como decano normalizador de la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de La Plata (1983-1984). Pero más importante fue su incorporación a la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, a partir de 1984. Allí ganó por concurso de oposición la cátedra de Literatura Hispanoamericana, y fue designado director del Instituto de Literatura Hispanoamericana (1984-1989). En compañía de valiosos colegas, que como él se incorporaban a la Universidad de Buenos Aires a consecuencia del restablecimiento de la democracia, reorganizó los estudios de literatura latinoamericana en la Facultad y, desde el Instituto, orientó las tareas de jóvenes investigadores, los vinculó con el mundo, y organizó congresos y otras reuniones profesionales que dieron trascendencia a la labor del grupo.

La amplitud de la labor docente de Lagmanovich puede apreciarse en términos de los muchos lugares en que, a su vez, desempeñan la docencia universitaria ex-alumnos suyos: universidades tales como las de Buenos Aires, California, Colonia, Comahue, Miami, Purdue, SUNY/Buffalo, Tucumán y otras varias en ambos continentes. Además de sus artículos en diversas publicaciones, los años de su vinculación con la Universidad de Buenos Aires vieron la aparición de dos nuevos libros: Códigos y rupturas: Textos hispanoamericanos (Roma, 1988) y Estructuras del cuento hispanoamericano (Xalapa, México, 1989).

Una reseña de las actividades de Lagmanovich no estaría completa sin mencionar su intensa labor como conferencista y en el dictado de cursos breves, así como su participación en congresos y simposios. Los resultados de su trabajo profesional fueron escuchados en numerosas ciudades argentinas (entre ellas Bahía Blanca, Buenos Aires, Catamarca, General Roca, Jujuy, Mar del Plata, Neuquén, La Plata, Posadas, Resistencia, Salta, San Juan y Tucumán); en países latinoamericanos, como Chile, México y Venezuela; en importantes universidades norteamericanas (Berkeley, Brown, Columbia, Michigan, Pennsylvania, Pittsburgh y Stanford, entre otras), y en otros países como Alemania, Checoslovaquia, España, los Países Bajos, Israel, Italia y Yugoslavia.

En 1989, al cumplir 62 años de edad y 50 años de trabajo en variadas actividades (de ellos, más de 30 en tareas docentes), David Lagmanovich renunció a su cátedra de la Universidad de Buenos Aires y se trasladó a Tucumán, a fin de contar con más tiempo para su labor de investigador y escritor. Al aceptar el cargo de Profesor de Posgrado en la Universidad Nacional de Tucumán, regresó, en una honrosa categoría, a la casa de estudios en donde había iniciado su tarea universitaria.

Para el año académico 1992-93 fue nombrado “Scholar in residence” en Brandeis University (Waltham, Massachusetts, Estados Unidos) y fruto de ese período es su libro Oficio crítico. Notas de introducción a la literatura hispanoamericana (Washington, D.C., 1994). Durante 1993-94 se desempeñó como profesor visitante en Ludwig-Maximilians-Universitat Munchen, en Augsburg, Alemania, durante el verano de 1994 en The Hebrew University of Jerusalem y actualmente se encuentra de regreso a sus tareas académicas en la Universidad Nacional de Tucumán.

 
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