El argumento principal de 'Presence' es el siguiente: lo que hace nuestro cuerpo influye en nuestra mente y nuestro comportamiento. En concreto, si
adoptamos lo que se denominan 'posturas de poder', posturas corporales que se caracterizan por hacernos grandes, por hacer que ocupemos espacio,
tenderemos a sentirnos realmente más poderosos, más seguros de nosotros mismos y, por tanto, en nuestra interacción con los demás, actuaremos con más
seguridad y asertividad, estaremos más 'presentes', y ello nos conducirá a mayores posibilidades y mayores logros.
Para desarrollar estas ideas, Amy Cuddy estructura el contenido de su libro en once capítulos:
- 'What is Presence?': donde intenta definir este concepto de su autoría y algo impreciso pero que tiene que ver con la autoafirmación, la
autoconfianza, asertividad y la capacidad de expresar cómodamente los verdaderos sentimientos, pensamientos y valores. La presencia surge de sentirse
personalmente poderoso.
- 'Believing and owning your story': en que aboga por el autoconocimiento y por la autenticidad.
- 'Stop preaching, start listening: how presence begets presence': Usando el ejemplo del reverendo Jeffey Brown y su acción con chicos
conflictivos en las calles de Boston, nos anima a escuchar, a conectar con la realidad, mostrarnos a nosotros mismos en la seguridad de que ese mostranos
a nosotros mismos provoca en los demás la misma reacción, el mostrarse, el hacerse presentes.
- 'I don't deserve to be here': aborda el denominado síndrome del impostor que hace que las personas se sientan inferiores y como si estuviesen
engañando de alguna manera cuando acceden a situaciones, cargos o recompensas que creen no merecer.
- 'How powerlessness shackles the self (and how power sets it free)': explica cómo la sensación de falta de poder nos disminuye, nos anula y
cómo, por el contrario, la sensación de poder, de poder personal, nos protege de emociones negativas, nos libera para tomar mejores decisiones, nos
hace ser más nosotros mismos, nos catapulta hacia lo mejor.
- 'Slouching, steepling, and the language of the body': parte del ejemplo de la famosa Haka de los equipos neozelandeses para explicar
la importancia del lenguaje corporal.
- 'Surfing, smiling and singing ourselves to happiness': comienza a explorar la conexión entre el cuerpo y la mente y concluye que el cuerpo
'nos habla', nos dice cómo sentirnos e incluso cómo pensar. Al contrario del pensamiento tradicional donde se piensa que el lenguaje corporal es consecuencia del
mental aquí se propone el sentido contrario.
- 'The boy shapes de the mind (so starfish up!)': continuando con el argumento del capítulo anterior, describe los experimentos con las posturas
de poder y de bajo poder (posturas corporales que reflejan el poder y confianza de la persona), estando las posturas de poder caracterizadas por hacernos grandes,
ocupar espacio, y las posturas de bajo poder por lo contrario, por empequeñecernos y hacer que nos encojamos. Más importante, los experimentos que se describen
parecen demostrar que el adoptar esas posturas intencionadamente, hace que nos sintamos más o menos poderosos. Concluye que el cuerpo modela la mente y ésta
el comportamiento.
- 'How to pose for presence': Con esa idea, en este capítulo explica de forma práctica cómo usar las posturas de poder para sentirnos más
confiados y poderosos en nuestro día a día.
- 'Self-nudging: how tiny tweaks lead to big changes': explica cómo el cambio se produce en pequeñás acciones, pequeños empujones. Y anima
a adquirir presencia, empleando como técnica las posturas de poder, en pequeños impulsos, pequeños avances.
- 'Fake it, till you become it': anima a la autenticidad, a manifestarnos nosotros mismos pero, en ese camino, usar
intencionadamente el lenguaje corporal
para sentirnos poderosos y que eso nos permita manifestarnos, estar presentes. Al principio es una práctica intencionada, en cierto modo una simulación pero,
al final, la seguridad y presencia se afianzarán en nuestra personalidad.
Las ideas de 'Presence', si bien creo que no completamente novedosas, son interesantes y ofrecen al final una receta práctica muy sencilla para mejorar nuestra
asertividad y nuestra comunicación. Quizá la autora divaga un poco y alarga en exceso un libro en que las ideas realmente se concentran en unos pocos conceptos.
Con todo, como digo, la propuesta creo que es buena y los conceptos interesantes y valiosos.
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